equipo
TRansHisTor(ia)
presentación guión y registros documentos créditos
45sna - Contrainformación

El damero colonial fue asimilado como programa urbano de las ciudades latinoamericanas tras la conquista europea. La retícula se sobrepuso a preestablecidos prehispánicos, determinó el orden de la ciudad republicana y, más adelante, estimuló transformaciones que reflejaron el cambio de mentalidades e ideologías de cara a la modernidad. En Bogotá, la ciudad colonial se superpuso a un ordenamiento territorial que resguardaba como reserva hídrica el margen oriental del río Funza (hoy llamado Bogotá), mientras el crecimiento de cercados se mantuvo sobre el margen occidental de ese cauce, donde desbocaban las cañadas que bajaban desde los cerros orientales. Esas aguas corren hoy canalizadas bajo nuestra ciudad moderna y describen el revés de su trama colonial.

Las transformaciones urbanas de la Sabana de Bogotá son una expresión de la sobreposición de cosmovisiones y proyectos ideológicos, políticos y económicos solapados a través del tiempo y manifiestos en la vida social y cotidiana nacional y regional con correspondencias a nivel continental. En el centro de Bogotá la forma serpenteante de las avenidas Jiménez y José Asunción Silva (aproximadamente calles 13 y 7), dispuestas respectivamente sobre los ríos Vicachá y Chiguachí, descasan de la constante reticular generando un indicador sobre el choque de dos tiempos y sobre el desarrollo de la sociedad colombiana.
Así como muchos claustros y solares encajaron en el damero colonial y algunos monumentos republicanos que conmemoran la Independencia definieron intersecciones, cruces y plazuelas en el espacio público, al mismo tiempo ciertos relieves y murales dispuestos sobre la arquitectura de edificios institucionales modernistas pueden comprenderse como inversiones simbólicas que sostuvieron y proyectaron relatos históricos, culturales y económicos que buscaban consolidar comunidades imaginadas en torno a particulares modelos de nación y desarrollo económico. Estas prácticas artísticas son un índice adicional del solapamiento histórico y cultural que el territorio ha soportado.

Del mismo modo, algunas prácticas artísticas contemporáneas funcionan como un índice de alternidad, alteridad o complemento a estos discursos que se han sustentado sobre la trama urbana y las inversiones simbólicas provistas por el arte, ofreciendo contrarrelatos y microhistorias que pueden complejizar y enriquecer una comprensión amplia y diversa de nuestra sociedad. Contrainformación integra estos tres niveles de registro como una expresión de la sobreposición de inversiones simbólicas que proponen la multiplicidad de relatos que conforman y despliegan “el revés de la trama”.

Contrainformación integró un circuito de relieves y murales que permiten confrontar algunos de esos relatos históricos y económicos construidos en el siglo XX, en diálogo con dos exposiciones de sala: por un lado, una selección de prácticas artísticas contemporáneas en la sede de la Galería Santa Fe, dispuesta en los bajos de la Plaza de la Concordia, cerca del borde oriental definido por los cerros tutelares, y próxima a una acequia que antaño irrigaba al río Vicachá. Por otro lado, una selección de prácticas artísticas y culturales vinculadas al proceso FARC tras la firma de los acuerdos de paz, reunidas en la Sala de Exposiciones ASAB de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas, situada en un edificio republicano construido sobre las bases de un antiguo claustro colonial al nororiente del centro histórico. Un conjunto de voces diversas para aprender de nuestro pasado, animar transformaciones en el presente y reimaginar futuros posibles.


Equipo TransHisTor(ia) – María Sol Barón Pino* y Camilo Ordóñez Robayo**–


_____

* Profesora de planta Departamento de Artes Visuales, Pontificia Universidad Javeriana, Bogotá.
** Profesor de planta Facultad de Artes ASAB, Universidad Distrital Francisco José de Caldas y profesor de cátedra Departamento de Artes Visuales, Pontificia Universidad Javeriana, Bogotá.

Esta curaduría hace parte del 45 Salón Nacional de Artístas "El revés de la trama".